INTERCAMBIO ESTUDIANTIL
Cada semestre ha estado saliendo la convocatoria donde la Universidad invita a los alumnos a irse de intercambio a otras universidades.
Y ¿A quien no se le hace buena idea ir a conocer otras ciudades de la república o mejor aun conocer otro país?
Como primer paso, escoges tu próximo destino, pero, hay que tener en cuenta que mientras más lejos quieras conocer más complicado será.
Comienza la aventura de los trámites y a sacar copias, copias y copias que van desde lo elemental que es tu acta de nacimiento hasta tu “repatriación sanitaria”. Visitas no sólo papelerías sino también el hospital, bancos, Tijuana, consulados por mencionar algunos.
Por fin llega el día. Te dicen que si te vas de intercambio, piensas en hacer tus maletas e irte. En un abrir y cerrar estas en el aeropuerto de Tijuana documentando tus maletas.
Pasan los 6 meses como si fueran 3. Tu lista de amigos aumento un buen porcentaje, tienes fotos de todos los lugares a los que fuiste, hasta puedes llegar hablando con un tono nuevo.
Piensas que todo acabo y regresaras a la escuela con toda tranquilidad como cada semestre pero, oh sorpresa, dar de alta tus materias y conseguir la revalidación de las materias que cursaste en la otra Universidad será otra odisea, porque nadie sabe nada, te mandan con una persona y esta con otra y otra.
Te inscribes hasta ajustes y esto te ocasiona que no puedas entrar a todas las materias porque ya no hay cupo, por lo que tienes que dar otra vuelta para que te agreguen y explicando que no es tu culpa que no te hayas inscrito antes.
Al poco tiempo y después de todo, poco a poco regresas a la normalidad. Y fraternalitas con nuevos compañeros porque vas en varios salones.
Pero eso si el viaje, la experiencia, tus fotos y recuerdos nadie te los quita y sientes que todo valió la pena. Si no es ahora que te animas a viajar, mañana puede ser muy tarde.