miércoles, 3 de diciembre de 2008

Conferencia: Ética en el ejercicio periodístico

Ponente: Luis Pedro Arellano Sarmiento


Por: Salvador Hernández Cueva
Luis Arellano Sarmiento es corresponsal del periódico Zeta en Mexicali, así como maestro de la materia ética en la Universidad Del Valle de México en Mexicali, la clase la imparte a los alumnos de comunicación.

La conferencia se trato acerca del trabajo que desempeña y cómo aplica la ética en el mismo, comentó que ser periodista es una labor difícil y la ética tiene mucho que ver debido a la corrupción que se genera con el gobierno y funcionarios, así como integrantes de partidos políticos.

Luis Arellano, mencionó los atentados que han ocurrido últimamente con los periodistas en la ciudad de Tijuana Baja, California. Durante la conferencia, nombró a los periodistas que han sido asesinados por la corrupción y por el narcotráfico, mencionó que han sido asesinados por miedo a que publiquen algo que perjudique ya sea al gobierno o a los narcotraficantes.

En la conferencia me llamó mucho la atención la actitud del ponente, ya que al estarnos platicando de los periodistas asesinados, resultaron ser sus amigos, cuando mencionó el motivo de su muerte comenzó a quebrantarse la voz. Pienso que las matanzas que están sucediendo en Tijuana pueden pasarle a cualquier persona cercana a nosotros.

El ponente cree que si valen la pena esas muertes, a pesar de que sean sus amigos, mencionó que esas muertes valen la pena para la creación de un periódico debido a que con ellas se hace poca conciencia, aunque sea, poca pero se hace, y sin ella comentó que estaríamos igual.

La ética en los medios de comunicación se ve quebrantada muchas veces, debido a los sobornos y “regalos” que se les otorgan a los periodistas.

Si se desea hacer un cambio en cuanto a la objetividad y dejar a un lado la corrupción, menciono Luis Arellano, que nosotros, los nuevos periodistas no debemos dejarnos que nos sobornen ni que nos den “regalitos” de esa manera no estamos comprometidos en omitir notas o no publicarlas.

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